Pero había otra cosa que me extrañaba. Que un corresponsal español en Estados Unidos se sepa por sí mismo una historia tan antigua parecía raro. Tal vez, he pensado, McCain ha hablado de ello recientemente, o tal vez uno o más medios han hablado de esta historia, y eso ha llamado la atención del corresponsal de El País para escribir su propio reportaje.
Unos segundos de Google han sido suficientes para encontrar que Newsweek contó efectivamente esta historia hace unos pocos meses en este artículo. De hecho, las similitudes entre el artículo de El País y Newsweek son extraordinarias, como pueden ustedes fácilmente comprobar. La estructura es muy similar, con algunos cambios ligeros; se omiten unos pocos datos, y se añaden otros pocos. Y ya está. Tenemos reportaje.
He hecho el ejercicio de marcar en rojo todos los datos del texto de El País que no aparecen en el texto de Newsweek. Esto es lo que resulta:
Durante siete largos años, entre 1991 y 1998, John McCain escapaba una vez al mes del trasiego de los pasillos de la Capitolio para conducir hasta el Hospital de Veteranos de Washington. Allí se sentaba a los pies de la cama de una persona que ya no le reconocía, pero a la que le debía casi toda su carrera como congresista. A Morris Udall le habían diagnosticado Parkinson en 1979. Doce años después había sufrido una grave caída en el Senado, rompiéndose el hombro y varias costillas. Fue ingresado en el centro hospitalario de los veteranos, donde pasó ocho años, hasta su muerte el 12 de diciembre de 1998.
McCain ha paseado el nombre de Udall por todo Estados Unidos durante la campaña de primarias, y lo seguirá haciendo hasta noviembre para cultivar su imagen de conservador de espíritu centrista, ya que su mentor fue uno de los senadores más liberales que han pasado por el Capitolio desde su fundación. Ambos se conocieron en 1983 cuando McCain, con 47 años, fue elegido representante por el Estado de Arizona. Inmediatamente se incorporó al Comité del Interior de la Cámara, dirigido por Udall, representante por el mismo Estado y afiliado al Partido Demócrata. "Mo me llamó después de nuestra primera sesión", explicó McCain en un acto de campaña el pasado cinco de abril en Arizona. "Me dijo que deberíamos trabajar juntos. Mi amistad con él ha sido una de las cosas más importantes no de mi carrera política sino de mi vida entera".
En menos de un mes, Mo Udall invitó a McCain a una conferencia de prensa en la localidad de Casa Grande, en Arizona. "Cuando empezó a desgranar los asuntos que afectaban a toda la ciudadanía, comenzó sus párrafos con las palabras 'el congresista McCain y yo estamos trabajando en este asunto'. Por supuesto, no estábamos haciéndolo. Por lo menos, yo todavía no estaba trabajando en ellos", explicó el candidato. "De forma deliberada, Mo estaba compartiendo su prestigio conmigo para darme mayor credibilidad entre otros constituyentes, un gesto extrañamente generoso para con un miembro del partido político opuesto".
Figura singular
Mormón, ex jugador de fútbol, tuerto a causa de un accidente en su infancia, Udall era una figura singular en el Congreso. En 1976 se enfrentó a Jimmy Carter en las primarias, y perdió por abanderar unos planteamientos demasiado liberales. Cuatro años después logró que el Congreso aprobara una ley que dobló la superficie de zonas verdes protegidas en EE UU. Le enseñó a McCain la importancia de los asuntos medioambientales más de 20 años antes de que se hablara de cambio climático. Consiguió que el ahora candidato se convirtiera en el rebelde que es, el político solitario que no ha dudado a la hora de romper la disciplina de partido en asuntos como la reforma de la financiación electoral o la investigación con células madre.
En 1998, cuando Udall estaba a punto de morir, el Senado comenzó a debatir sobre las implicaciones éticas de la investigación con células madre embrionarias. McCain era ya senador y, en principio, como político antiabortista, tenía en mente oponerse a este tipo de experimentación. Anne Udall, hija de su mentor, se reunió con él para recordarle que, tal vez, la investigación con células madre le hubiera ahorrado mucho sufrimiento a su padre. "Me dijo que guardaba mucho afecto y amor por Mo, y recordó cómo había decaído con los años", dijo Anne recientemente a la revista Newsweek. Al final, McCain votó a favor de la investigación con embriones. Y así se ha mantenido hasta hoy, por una cuestión de estricta lealtad. "Al fin y al cabo, esas células madre van a ser descartadas o congeladas para siempre. Uno debe hacer lo que esté en su mano para aliviar el dolor humano", dijo en un debate con otros candidatos el pasado 26 de enero.
Al final de sus días, Udall no reconocía a McCain ni a nadie que fuera a visitarle. Su visión era casi inexistente. No podía articular palabra alguna. Pero el ahora candidato le llevaba recortes de prensa sobre sus temas favoritos: el medio ambiente y los derechos de las tribus nativas norteamericanas. Le leía los periódicos durante horas, siempre exhibiendo una humildad de la que ha hecho también gala en esta campaña electoral. "Cuando entré en el Congreso yo era un gilipollas. No sabía nada de nada, aunque creía saberlo todo", le dijo en una ocasión a la hija de Udall. "Tu padre me enseñó la importancia del consenso y el compromiso".
El Udall de Obama
En al menos un momento de su carrera, ya en el senado, McCain intentó ser el Udall de otro joven senador, un político afroamericano de Illinois llamado Barack Obama. Le propuso que ambos consensuaran el texto de una ley que regularía las relaciones entre los congresistas y los grupos de presión. En principio, llegaron a un acuerdo. Pero la relación se estropeó pronto, cuando Obama decidió apoyar un texto que habían elaborado sus compañeros de filas. McCain, herido, le envió una carta, fechada el seis de febrero de 2006, en la que se confesaba "avergonzado" por no haber previsto que las palabras de Obama "eran puro lustre retórico del que se usa en política para que los intereses partidistas parezcan más nobles". "No cometeré el mismo error dos veces", advertía McCain entonces. Fue aquel el primer episodio de una dura batalla que acabará de librarse en noviembre, cuando uno de estos dos senadores gane la presidencia. Para ambos, atrás queda el ejemplo de unidad entre partidos de Mo Udall.
No es la primera vez: |
he añadido un comentario en el articulo del pais referenciando este articulo. A ver si lo publican :-D |
Los datos que aporta Alandete parecen sacados de otros medios, como Arizona Republic, que recientemente también han hablado de Mo Udall. Ya se sabe cuando copias de un sitio es plagio y cuando copias de varios investigación. |
Yo también he intentado citar este post en los comentarios del artículo en elpais.com. |
Por cierto que lo de "Cuarentena" combinado con una acusación relativamente grave como la de plagio es un oximorón. Si es para protegerse de las represalias, pues en fin, mejor tirar la piedra sin esconder la mano. |
La historia no es tan antigua ni tan secreta como puede parecer, Mo Udall está de actualidad porque su hijo Mark se está metiendo en política. Hay unas cuantas referencias a los dos en la cobertura de las elecciones de EE UU. En efecto, hemos comprobado que David Alandete lee la prensa estadounidense. Escandaloso, sin duda. |
Por cierto que lo de Google era innecesario. Bastaba con ir a la página de Newsweek, el propio autor da la pista del plagio. Hay que ser tonto, desde luego. |
Lo de tonto va por Alandete, y es irónico, no se me malentienda. |
Yo soy Espartaco. |
Caray, ni siquiera ésta. Fusila un artículo añadiendo sólo pequeñas notas de otra fuente online, pasa de puntillas por la atribución que vincula solamente a una cita pero firmándolo con su nombre (¿por la traducción?), ¡y tampoco es malaprensa! Es más, es meritorio ya que indica que el autor lee la prensa estadounidense; más meritorio aún, le pagan por hacerlo. |
Jeje. Es cutre, probablemente hasta sea Malaprensa (que cada vez tengo menos claro cómo se define). Pero no es un plagio. En realidad nuestra opinión es irrelevante, habría que saber lo que piensa Newsweek. |
Por cierto Terry, eché de menos tu opinión sobre el verbo genocidar y las patadas al diccionario. |
Nada, que no se publica el comentario referenciando este post. Como va la censura en el pais online... |
Jajaja |
Si no me equivoco, plagiar es copiar algo de algún lugar, literalmente. Obviamente hay cosas que son de dominio público. Esta historia no es una exclusiva de Newsweek, me temo. Y McCain ha hablado de Udall en numerosas ocasiones. En los debates de primarias lo citó más de tres veces. Desgraciadamente, la labor de las corresponsalías se ve muy limitada por la escasez de medios. A veces, los corresponsales se deben inspirar en todo tipo de fuentes para acercar contenidos a los lectores que viven en España. Este señor, por lo menos, ha añadido algo de su cosecha, aunque el texto no sea de Pulitzer, desde luego. Los links que cuelga el otro señor de antes, en El Mundano, me parecen parte de una cruzada partidista y de una mala leche que mejor no comentamos. Si tanto les gusta la SGAE y la RIAA no la tomen con gente que nada tenga que ver con ella. |
Señor Alex B. presuponer que me gustan la SGAE o la RIAA es mucho suponer. Si se toma la molestia de leer mi blog quizás se diese cuenta de su error. No confunda gusto con disgusto o con indiferencia. Que además no tiene nada que ver con mi opinión sobre Alandete, que ya he expresado. Y no todo el mundo parece estar en contra de la RIAA como parecen dar a entender tanto usted como su protegido, el Sr. Alandete. Fíjese que The Huffington Post ha fichado a Hillary Rosen, para dirigir su oficina de Washington. La Rosen ha sido la cabeza de la RIAA durante los últimos años… |
Usted debe de tener mucho tiempo libre, muy señor mío. |
Claro que es un problema de sus lectores. Si pagaran más por lo que leen tendrían un producto mejor. Pero me temo que no están dispuestos a hacerlo. Es la ley de la oferta y la demanda. |
Señor Alex B., no se crea que tenga todo el tiempo libre que desearía. Nunca es suficiente. Por ejemplo, cada partido de tenis me lleva una mañana… Y John que no para de trabajar –no como yo- ya le ha contestado en mi blog: |
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